Siempre es un placer volver a juntarse con amigos y recordar las batallitas vividas juntos en otras escapadas. La verdad es que cuando nos reunimos con Carlos, Roser, Luis y Laura siempre nos pasa algo, no lo relato aquí porque no terminaría , pero vaya, esta vez no podía ser diferente y el domingo nos disponíamos a pasar el día juntos, comidita y después bañito en la piscina de Marines, vamos, lo que apetece hacer un domingo en pleno mes de agosto. Pues bien, a la comidita llegamos de maravilla, pero el baño se complicó de tal manera que casi tienen que venir los bomberos a rescatarnos. Comenzó a llover a cántaros, pero a cántaros lo que se dice a cántaros y durante casi una hora fue imposible salir del techado que nos refugiaba. Acabamos tapados con toallas y finalmente tuvieron que entrar en el recinto de la piscina con un coche para cargar a Marc que sólo tiene tres meses y de paso a todos los demás. Eso sí, la lluvia que cayó fue maravillosa para el campo y abundante. Los truenos y los rayos no nos gustaron tanto y el bañito en la piscina queda pendiente para el próximo verano...cosas que pasan,el clima y sus sorpresas.
2 comentarios:
Vaya ¡otra forma de remojarse, supongo! :-)
Por cierto, el blog está casi casi de cumple ¿no? :-D
Holaaaaaaaaaa!!!!que sorpresa!, pues si, casi, casi de cumple, el día 31 pondremos las velitas. ¡Un año ya!, el timepo pasa volando. Un besote Gloria.
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